Esta es una de las leyendas acerca de maldiciones en el fútbol más conocida en la República Aregntina. Todo empezó el domingo 26 de febrero de aquel 1984. En aquella fecha, Boca Juniors viajó a La Pampa para enfrentar a Ferro de General Pico, un humilde clubcito fundado en 1934, y que participaba por primera vez del entonces Campeonato Nacional. Ferro se había clasificado luego de ganarle en la final a Germinal de Rawson y, apremiados, sus dirigentes levantaron un estadio en apenas 120 días para poder jugar de local ante Boca. Lo llamaron el Coloso del barrio Talleres y en la inauguración tiraron la casa por la ventana: fuegos artificiales, tres paracaidistas haciendo piruetas y un cierre a todo trapo con Estela Raval. En aquel día de la inauguración, el estadio y la ciudad eran una fiesta: enfrentaban al Boca de Gatti, Ruggeri y Gareca: más de 20 mil personas habían copado las tribunas.
El lío empezó cuando faltaba un rato para el arranque del partido y llegó la hinchada de Boca. Ahí se armó un gran revuelo. Entraron a los empujones y se cruzaron con los hinchas locales. Hubo encontronazos y corridas, y los de Boca les robaron una bandera a los de Ferro. Era verde, con letras en blanco, y decía: ''Ferro, Dios y tu hinchada están aquí''. Si bien los de Boca se quedaron con la bandera, el incidente no pasó a mayores y se jugó el partido.
El partido terminó 0-0. Los de Boca lamentaron el punto perdido y los locales lo festejaron como un triunfo. La figura fue el arquero de Pico, Oscar López, que, -oh casualidad,- había jugado en Boca. Pero ahí no termina la historia. Ahí recién empieza,... Como los de Boca se llevaron la bandera, los dirigentes del cuadro local intentaron contactarse con gente del club para recuperarla. Pero no hubo respuesta,... y se empezó a correr el rumor de que los hinchas locales le habían hecho un maleficio a la bandera, una especie de "gualicho" o un pase magnético, como se le dice. Y la leyenda creció cuando Boca empezó con una terrible mala racha.
"Gualicho" o no, lo cierto es que luego del incidente de la bandera, Boca sólo ganó dos partidos (contra Talleres 2-0 y el de vuelta ante el propio Ferro). Después quedó eliminado del Nacional y ¡estuvo nueve fechas sin ganar! (de las peores rachas de su historia, superada sólo por una de 1957, cuando fueron diez los partidos sin triunfos). Al Zurdo López (entrenador), lo echaron y, luego del interinato de Ernesto Grillo y Alberto González, asumió la dirección Dino Sani. Pero la suerte no cambió. Fue tan pero tan triste la seguidilla que hasta Fernando Morena, el goleador uruguayo que con bombos y platillos había llegado para reemplazar a Gareca, terminó metiendo un solo gol y hasta ¡erró un penal ante un jugador de campo! Fue el 22 de abril del 84. Boca enfrentaba a Platense. El partido estaba 2-2 (Morena ya había hecho uno de penal) y, sobre la hora, a Boca le dieron otro tiro desde los 12 pasos. La pelota la volvió a agarrar Morena, claro. Pero enfrente ya no estaba Puentedura. El arquero de Platense había salido por lesión y, como en el equipo "Calamar" ya habían agotado los cambios, tapó el defensor Pablino López Turitich. "Son tristezas que te tocan vivir. En esa época de Boca era imposible hacer una mejor campaña"-, recuerda Morena. Y por si esto fuera poco, tiempo después, la Dirección General de Justicia decretaría la intervención de la entidad,...
Raúl Bertone, del diario La Reforma de Pico, cuenta: "Acá la historia de la bandera es famosa. Dicen que sí, que estaba "engualichada" y hasta se habla de que, enterados de esto, los dirigentes de Boca mandaron a La Pampa a un directivo para devolverla y terminar con la maldición. No sé si la devolvieron, acá la bandera no se vio nunca más. Eso sí, al partido siguiente la hinchada de Ferro ya había hecho una nueva bandera. Pero sin "gualichos".
El lío empezó cuando faltaba un rato para el arranque del partido y llegó la hinchada de Boca. Ahí se armó un gran revuelo. Entraron a los empujones y se cruzaron con los hinchas locales. Hubo encontronazos y corridas, y los de Boca les robaron una bandera a los de Ferro. Era verde, con letras en blanco, y decía: ''Ferro, Dios y tu hinchada están aquí''. Si bien los de Boca se quedaron con la bandera, el incidente no pasó a mayores y se jugó el partido.
El partido terminó 0-0. Los de Boca lamentaron el punto perdido y los locales lo festejaron como un triunfo. La figura fue el arquero de Pico, Oscar López, que, -oh casualidad,- había jugado en Boca. Pero ahí no termina la historia. Ahí recién empieza,... Como los de Boca se llevaron la bandera, los dirigentes del cuadro local intentaron contactarse con gente del club para recuperarla. Pero no hubo respuesta,... y se empezó a correr el rumor de que los hinchas locales le habían hecho un maleficio a la bandera, una especie de "gualicho" o un pase magnético, como se le dice. Y la leyenda creció cuando Boca empezó con una terrible mala racha.
"Gualicho" o no, lo cierto es que luego del incidente de la bandera, Boca sólo ganó dos partidos (contra Talleres 2-0 y el de vuelta ante el propio Ferro). Después quedó eliminado del Nacional y ¡estuvo nueve fechas sin ganar! (de las peores rachas de su historia, superada sólo por una de 1957, cuando fueron diez los partidos sin triunfos). Al Zurdo López (entrenador), lo echaron y, luego del interinato de Ernesto Grillo y Alberto González, asumió la dirección Dino Sani. Pero la suerte no cambió. Fue tan pero tan triste la seguidilla que hasta Fernando Morena, el goleador uruguayo que con bombos y platillos había llegado para reemplazar a Gareca, terminó metiendo un solo gol y hasta ¡erró un penal ante un jugador de campo! Fue el 22 de abril del 84. Boca enfrentaba a Platense. El partido estaba 2-2 (Morena ya había hecho uno de penal) y, sobre la hora, a Boca le dieron otro tiro desde los 12 pasos. La pelota la volvió a agarrar Morena, claro. Pero enfrente ya no estaba Puentedura. El arquero de Platense había salido por lesión y, como en el equipo "Calamar" ya habían agotado los cambios, tapó el defensor Pablino López Turitich. "Son tristezas que te tocan vivir. En esa época de Boca era imposible hacer una mejor campaña"-, recuerda Morena. Y por si esto fuera poco, tiempo después, la Dirección General de Justicia decretaría la intervención de la entidad,...
Raúl Bertone, del diario La Reforma de Pico, cuenta: "Acá la historia de la bandera es famosa. Dicen que sí, que estaba "engualichada" y hasta se habla de que, enterados de esto, los dirigentes de Boca mandaron a La Pampa a un directivo para devolverla y terminar con la maldición. No sé si la devolvieron, acá la bandera no se vio nunca más. Eso sí, al partido siguiente la hinchada de Ferro ya había hecho una nueva bandera. Pero sin "gualichos".
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