La policía sudafricana tuvo que intervenir para calmar a las masas enfurecidas que trataban de comprar entradas para el Mundial de Fútbol, luego que los sistemas informáticos de venta sufriesen un fallo técnico.
Muchas personas habían pasado la noche a la intemperie esperando que abriesen las taquillas para adquirir las entradas.
El secretario general de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), Jerome Valcke, ha pedido perdón públicamente por este fallo.
No es la primera vez que el sistema se colapsa. De hecho ya ocurrió el mes pasado cuando comenzaron las primeras ventas de entradas en el país.
Venta escalonada
La FIFA ha estado vendiendo las entradas de forma lenta y escalonada. Este viernes anunciaron que se pondrían a la venta las últimas 90.000, incluidas las de la final.
Según informa el corresponsal de la BBC en Sudáfrica, Jonah Fisher, se podían ver grandes colas de aficionados en los alrededores de todos los centros de venta, pero, en el momento en que se abrieron las puertas, el sistema informático se vino abajo.
La policía intervino para controlar las colas de simpatizantes, ante las reacciones enfurecidas de las personas que habían pasado toda la noche esperando para ese momento.
Según afirma Fisher, se suponía que este era el último empujón de la FIFA para vender el 5% de las entradas que todavía estaban en sus manos.
Pero no es la primera vez en este proceso que todo termina en vergüenza y, en este caso, en una disculpa pública del secretario general de la FIFA.
Todo esto genera dudas sobre la organización del mundial. Los estadios sudafricanos están preparados para el torneo pero muchas de las infraestructuras a su alrededor no han sido todavía puestas a prueba.
Este jueves un internacional amistoso en Soweto produjo un monumental atasco de tráfico lo que hizo que muchos aficionados no fueran capaces de llegar al recinto futbolístico a tiempo para el comienzo del partido.
(FUENTE: bbc.co.uk)
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