Entre los futbolistas, hay preferencias por diferentes números de camisetas, pero en algunos casos, ni normativas FIFA ni consejas de los no-supersticiosos valen a la hora de escoger un número de camiseta, y aquí compartimos algunas notas curiosas al respecto:
Las preferencias personales a la hora de elegir un número de camiseta son muy importantes: es el caso del alemán Muller, que ha optado por rendir homenaje al mítico "torpedo Muller", que jugó con el número 13 en el año 1974 sorteando a la mala suerte.
Precisamente el 'torpedo Muller' batió en este Mundial a Jongbloed, un portero holandés que lucía otro dorsal atípico para un portero, el 8. Lo hizo en la final de los dos Mundiales que jugó contra Holanda.
En la de Argentina, Fillol, bajo palos, lucía el '5'. Y es que también el 1 no fue sólo de porteros: aunque la nueva normativa FIFA obligue ya a que uno de los porteros de los combinados nacionales luzca el número 1, precisamente en el Mundial de España '82, el centrocampista ofensivo Osvaldo Ardiles se decidió a saltar a los terrenos de juego con el número 1 a la espalda ya que por entonces los dorsales se daban en orden alfabético. Aunque no le dio mucha suerte, ya que Argentina no pudo revalidar el título de campeona de 1978 (final en la que lució el 2) al caer derrotada en la segunda fase.
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